El Ejército de Colombia informó de la incautación de cuatro toneladas de cocaína y la destrucción de dos laboratorios de procesamiento de drogas en una zona rural del departamento de Nariño, en el sur del país, en la frontera con Ecuador.
Uno de los laboratorios eliminados era de procesamiento de cocaína y el otro de pasta base, que se elabora con sulfato de esa sustancia, según informó el cuerpo castrense en su cuenta de la plataforma X.
Asimismo, tropas de la División de Aviación Asalto Aéreo encontraron una tonelada de pasta base de coca, 5.600 galones de insumos líquidos y 1.300 kilogramos de insumos sólidos. Según esta información, este hallazgo «afecta en más de 22.000 millones de pesos» (unos 5,3 millones de dólares) a organizaciones armadas ilegales.
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Excelente trabajo del Ejército de Colombia al incautar esa enorme cantidad de cocaína. ¡Espero que esto debilite a los narcotraficantes!
La lucha contra el narcotráfico es crucial, pero es triste que Colombia siga siendo un centro de producción de drogas.
Felicidades al Ejército por su valiente operación. Esto demuestra el compromiso en la lucha contra el narcotráfico.
La incautación es un paso importante, pero el problema de las drogas en Colombia es profundo y persistente.
Es desgarrador ver cuánto dinero está involucrado en el narcotráfico. Necesitamos medidas más efectivas para combatirlo.
La destrucción de los laboratorios es un logro significativo en la lucha contra las drogas en Colombia.
Es preocupante que las organizaciones armadas ilegales aún obtengan ganancias tan grandes del narcotráfico.
Apoyo a las tropas que arriesgan sus vidas en esta peligrosa misión. Gracias por su servicio.
La incautación de cocaína es un duro golpe para el tráfico de drogas, pero queda mucho por hacer.
Colombia necesita abordar las raíces del problema de las drogas para lograr un cambio sostenible.
La incautación de insumos también es importante para dificultar la producción de drogas.
La guerra contra las drogas es costosa y complicada, pero es esencial para la seguridad y el bienestar de Colombia.
Es decepcionante que las organizaciones armadas ilegales aún tengan tanto poder en la industria de la droga.
La lucha contra el narcotráfico es un esfuerzo constante que requiere cooperación internacional.
La destrucción de laboratorios debería ser un recordatorio de la necesidad de programas de prevención de drogas.
Colombia merece un futuro libre de narcotráfico y violencia. Esta incautación es un paso en esa dirección.
La inversión en seguridad y capacitación es esencial para fortalecer la lucha contra el narcotráfico.
Es un golpe financiero significativo para los narcotraficantes, pero necesitamos más acciones coordinadas.
La cocaína destruida podría haber causado un gran daño en todo el mundo. Esto es un alivio.