Nueva York, EE. UU. — El senador Rafael Barón Duluc tuvo ayer una destacada participación en el foro “Protegiendo el Sueño Dominicano”, celebrado en la ciudad de Nueva York, un evento organizado por el Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, y respaldado por el cónsul dominicano en Nueva York, Jesús Vásquez.
Este importante encuentro reunió a expertos legales, representantes gubernamentales, líderes comunitarios y ciudadanos afectados por estafas inmobiliarias, con el objetivo de generar conciencia, compartir herramientas de prevención y promover vías seguras para invertir en la República Dominicana.
Durante su intervención, el senador Barón Duluc presentó el proyecto de ley que ha depositado en el Senado dominicano sobre la regulación de la intermediación inmobiliaria y la publicidad, una propuesta legislativa clave para proteger a quienes buscan adquirir propiedades en el país, incluyendo a los dominicanos residentes en el exterior.
“El sueño de regresar e invertir en nuestra tierra no puede convertirse en una pesadilla. Con este proyecto de ley queremos reducir al mínimo los riesgos y estafas en las transacciones inmobiliarias, garantizando un mercado más transparente, seguro y confiable para todos los dominicanos, sin importar dónde residan”, expresó el senador.
El foro abordó temas fundamentales como los fraudes más comunes en el ámbito inmobiliario, los mecanismos legales disponibles tanto en República Dominicana como en Estados Unidos, y las acciones institucionales necesarias para garantizar una compra segura.
El senador Barón Duluc agradeció al Defensor del Pueblo, al Consulado Dominicano en Nueva York y a los sectores involucrados por abrir espacios de diálogo y acción conjunta. “La diáspora dominicana es una prioridad para nosotros; su aporte al país es invaluable y merece que les brindemos las garantías jurídicas necesarias para que invertir en su tierra sea un sueño protegido, no una amenaza”, concluyó.
Ya era hora que alguien pensara en los que mandan su dinerito pa’ hacer su casa y después se lo tumban.
Si ese proyecto se aprueba, más de uno va a tener que dejar de hacerle cuentos a la gente con solares ficticios.
Ojalá no sea solo bulto, porque la mafia de los terrenos está como el arroz, en to’ lao.