En mayo de 2025, las autoridades de inmigración de Estados Unidos detuvieron a 1,461 inmigrantes indocumentados en el estado de Massachusetts como parte de la operación “Patriot”, enfocada en combatir la delincuencia organizada transnacional.
La cifra fue confirmada por el director interino del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), Todd Lyons, quien declaró que estas acciones reflejan el compromiso del gobierno con la seguridad nacional y pública.
La mayoría de los detenidos tenía antecedentes penales graves tanto en EE. UU. como en otros países, incluyendo delitos como asesinato, violación, narcotráfico y abuso sexual infantil, según informó Patricia Hyde, directora interina de la Oficina de Campo de ICE en Boston. Las autoridades aseguran que todos los arrestados serán deportados, y al menos 277 ya tenían órdenes de expulsión emitidas por jueces migratorios.
El operativo coincidió con el arresto reciente de Marcelo Gomes, un joven brasileño de 18 años que había vivido en EE. UU. desde niño, lo que ha generado preocupación entre defensores de derechos humanos y autoridades estatales.
La gobernadora de Massachusetts, Maura Healey, exigió explicaciones al gobierno federal sobre la situación del joven. Además, este escenario se desarrolla en medio de tensiones legales por el futuro del «parole humanitario» implementado durante la administración de Joe Biden.