El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) arrestó a un inmigrante mexicano acusado de amenazar con asesinar al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó este miércoles el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
“Gracias a nuestros oficiales de ICE, este extranjero ilegal que amenazó con asesinar al presidente Trump está tras las rejas”, declaró Kristi Noem, secretaria del DHS.
Aunque la información se divulgó recientemente, el arresto tuvo lugar el pasado 22 de mayo en el estado de Wisconsin. El detenido fue identificado como Ramón Morales Reyes, de 54 años, quien, según las autoridades, se encontraba de manera irregular en territorio estadounidense.
La detención se produjo luego de que, el 21 de mayo, un oficial de ICE recibiera una carta manuscrita atribuida a Morales, en la que afirmaba que planeaba dispararle a Trump en la cabeza durante uno de sus mítines, para luego autodeportarse.
En la misiva, divulgada por el DHS y publicada por Noem en redes sociales, Morales escribió:
“Estamos cansados de que este presidente se meta con nosotros, los mexicanos. Hemos hecho más por este país que ustedes, la gente blanca. Han estado deportando a mi familia y creo que es tiempo de que Donald J. Trump tenga lo que se merece”.
La titular del DHS recordó que esta amenaza se produce a menos de un año del atentado sufrido por Trump durante un mitin en Butler, Pensilvania, en el marco de la campaña presidencial.
“Todos los políticos y miembros de los medios deberían tomar nota de estos repetidos atentados contra la vida del presidente Trump y moderar su retórica. Continuaré tomando todas las medidas necesarias para proteger al presidente”, advirtió Noem.
De acuerdo con el DHS, Morales ingresó ilegalmente a EE.UU. al menos nueve veces entre 1998 y 2005. Su historial criminal incluye delitos graves como atropello y fuga, daños criminales a la propiedad y conducta desordenada con agravantes por abuso doméstico.
Tras su arresto, el inmigrante fue recluido en la cárcel del condado de Dodge, en Juneau, Wisconsin, donde permanece bajo custodia de ICE mientras se define su proceso de deportación.
¿Y este loco pensaba que con una carta y un tiro iba a resolver su vida?
¡Pero mira qué nivel de disparate! Después del tiro, él mismo se iba a deportar… ¡brillante el tipo!
Lo que hace la desesperación y la locura juntas…