El Kremlin pidió este martes no generar expectativas sobre resultados inmediatos tras la segunda ronda de negociaciones con Ucrania realizada en Estambul. Durante el encuentro, ambas partes intercambiaron memorandos con sus propuestas para el fin del conflicto, aunque Rusia enfatizó que el proceso será largo y complejo.
El portavoz Dmitri Peskov destacó que se lograron acuerdos importantes, como el mayor intercambio de prisioneros desde el inicio de la guerra en 2022.
Rusia entregó a la delegación ucraniana un memorándum en el que exige, entre otros puntos, que Kiev reconozca la anexión rusa de Crimea, Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón.
Además, solicita la celebración de nuevas elecciones en Ucrania y una reducción significativa de su ejército, condiciones consideradas inaceptables por Kiev hasta ahora. Moscú está a la espera de la respuesta oficial ucraniana.
El Kremlin no quiso adelantar si estaría dispuesto a hacer concesiones, alegando que ese tipo de discusiones no pueden ser públicas. La próxima ronda de conversaciones podría realizarse a finales de junio, aunque el panorama se mantiene incierto. Las demandas rusas marcan una postura firme que complica el avance hacia un acuerdo definitivo.
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