Cada 11 de junio se conmemora el Día Mundial del Cáncer de Próstata, una fecha destinada a concienciar a la población masculina sobre la importancia del diagnóstico precoz y el tratamiento oportuno de esta enfermedad, que afecta a más de 1,2 millones de hombres en todo el mundo.
¿Qué es el cáncer de próstata?
El cáncer de próstata se origina cuando las células de la próstata, una glándula del tamaño de una nuez situada debajo de la vejiga y delante del recto, crecen de forma descontrolada. Esta glándula es responsable de producir el líquido seminal que transporta y nutre el esperma.
A diferencia de otras enfermedades, no está directamente vinculado a hábitos poco saludables como el tabaquismo o el alcoholismo. La edad y los antecedentes familiares son los principales factores de riesgo.
Los signos de advertencia más frecuentes incluyen:
- Dificultad para comenzar a orinar.
- Esfuerzo al orinar y chorro débil.
- Necesidad frecuente de orinar, especialmente en la noche.
- Sensación de vaciado incompleto de la vejiga.
- Disfunción eréctil.
- Sangre en la orina o el semen.
- Dolor en caderas, columna o costillas.
- Debilidad o adormecimiento en piernas y pies.
- Pérdida inexplicada de peso.
El diagnóstico es realizado por un urólogo mediante un examen de tacto rectal y pruebas de laboratorio para medir el Antígeno Prostático Específico (APE o PSA) en sangre.
El tratamiento dependerá del estado de avance del cáncer e incluye:
- Cirugía para extirpar la próstata (prostatectomía).
- Radioterapia.
- Terapia hormonal.
- Quimioterapia.
- Crioterapia.
- Inmunoterapia.
- Monitoreo continuo del APE.
El cáncer de próstata es curable si se detecta a tiempo, por lo que se recomienda que los hombres mayores de 40 años realicen controles regulares, especialmente si tienen antecedentes familiares.
Asimismo, adoptar hábitos de vida saludables puede reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Se recomienda:
- Evitar alcohol, tabaco y drogas.
- Mantener una alimentación rica en frutas, vegetales y proteínas saludables.
- Hacer ejercicio físico regularmente.
- Evitar la automedicación.
- Tener una vida sexual activa y saludable. Según estudios de la OMS, puede reducir hasta en un 47% el riesgo de padecer cáncer de próstata.
Oigan hombres! No esperen sentir dolor pa’ ir al médico… el chequeo salva vidas.
Ese tabú del examen ya está viejo… ¡más vale un ratito incómodo que una vida entera perdida!
El cáncer de próstata no da síntomas al principio… por eso hay que chequearse, aunque uno se sienta bien.