La Organización de las Naciones Unidas expresó su preocupación por el despliegue de 2,000 soldados de la Guardia Nacional en Los Ángeles, ordenado por el presidente Donald Trump para enfrentar las protestas generadas tras redadas masivas contra migrantes.
La ONU hizo un llamado a evitar una mayor militarización del control migratorio en Estados Unidos y pidió una desescalada de las tensiones.
El portavoz adjunto de la ONU, Farhan Haq, instó a los gobiernos local, estatal y federal a colaborar para bajar la tensión y evitar el uso excesivo de la fuerza.
Este despliegue se produce luego de que el gobernador de California, Gavin Newsom, pidiera a Trump que no militarizara el conflicto migratorio. El presidente hizo caso omiso y justificó la medida como una forma de proteger edificios federales.
Amnistía Internacional también condenó el uso de tropas, calificándolo de «alarmante» y denunciando que busca infundir miedo y reprimir la disidencia. Su director en EE. UU., Paul O’Brien, afirmó que esta acción representa un retroceso en materia de derechos humanos y libertad de expresión, al tratar de silenciar a quienes defienden a la comunidad migrante.
¿Y desde cuándo es con metralleta que se resuelve un lío migratorio?
Trump parece que quiere apagar un fuego con gasolina.
La ONU ta’ clara: eso es más show que solución.