El líder de la delegación rusa, Vladímir Medinski, afirmó categóricamente que las acusaciones de que el Ejército ruso secuestra niños ucranianos son infundadas. Según sus declaraciones, lejos de haber secuestros, lo que se ha evidenciado en el campo de batalla es que los soldados rusos han salvado a numerosos menores durante los combates.
Medinski acusó al régimen de Kiev de montar todo un “espectáculo” dirigido a la opinión pública europea con el fin de distorsionar la realidad del conflicto.
Estas declaraciones se realizaron en el marco de las negociaciones en Estambul, donde la narrativa sobre el destino de los menores ha sido uno de los temas centrales. Mientras que Ucrania presentó un listado de 339 nombres de niños solicitados para ser devueltos, la parte rusa rechaza estas afirmaciones, subrayando que, en cambio, sus fuerzas han actuado para rescatar y proteger a los infantes afectados por los enfrentamientos.
Medinski enfatizó que no existe evidencia alguna de que se haya producido un secuestro sistemático de menores por parte del Ejército ruso, sino que lo cierto es que cada niño rescatado es un testimonio del compromiso de sus soldados en salvar vidas en medio del conflicto.
Eso de que “rescatan” niños en medio de una guerra suena más a excusa que a salvación.
¿Y por qué Ucrania tiene una lista con 339 muchachitos entonces?
Medinski lo que quiere es limpiar la imagen de Rusia, pero el mundo entero está mirando.
Si no hay secuestros, ¿por qué no devuelven los niños y ya?