El presidente Donald Trump advirtió que Estados Unidos no aceptará ningún tipo de enriquecimiento de uranio por parte de Irán como parte de las actuales negociaciones nucleares.
Estas conversaciones, mediadas por Omán desde abril, son las primeras de alto nivel desde que EE.UU. se retiró del acuerdo nuclear en 2018. Trump reaccionó luego de que se revelara que la propuesta estadounidense permitiría cierto enriquecimiento limitado.
Por su parte, Irán rechazó cualquier pacto que limite sus «actividades pacíficas» en el programa nuclear y exigió garantías firmes del levantamiento de sanciones. Funcionarios iraníes insistieron en que su programa tiene fines civiles y negaron que busquen desarrollar armamento nuclear, mientras la comunidad internacional y especialmente Israel mantienen dudas sobre sus intenciones.
El contexto se vuelve más tenso tras un informe del OIEA que revela un incremento del uranio enriquecido al 60% en Irán, muy cerca del 90% necesario para armas nucleares. La organización pidió mayor transparencia y explicó que el informe es técnico y no político. Las autoridades iraníes, en cambio, lo calificaron de manipulación política. Egipto pidió reducir tensiones para evitar una guerra regional.
Trump salió con el pecho afuera diciendo que con uranio no se juega
Irán no quiere que le pongan candado a sus laboratorios nucleares
Esas negociaciones están más tensas que una olla de presión